- No entiendo qué problema tienes, Tom.
- No es mi problema, Scott... Es el problema de todos. No podemos seguir de este modo. ¿Qué es lo que nos hace creer que podemos extraer los minerales de un planeta horadándolo hasta llegar a su mismo núcleo? ¿O explotar especies hasta extinguirlas? ¿O transformar ecosistemas enteros?
- Sé realista, Tom... Era bien sabido que los recursos de la Tierra no iban a durar para siempre. ¿Y qué íbamos a hacer, ignorar otros recursos que teníamos a nuestra disposición, sólo porque, dentro de un millón de años, pueden ser de utilidad para alguna forma de vida que aún ha de evolucionar? - ¡JODER!
- ¡Nos ha ido de un pelo!
- ¡Estamos registrando un impulso energético!
- Los sensores dicen que, es en su mayor parte metálico... Pero, sea lo que sea, se mueve muy deprisa como para ser hecho por el hombre.
- Sí, quizá sea un meteroro. Bueno, como iba diciendo, ¿qué ibamos a hacer? Decir, "se acabó el carbón, sí, todo lo que necesitamos está en ese otro planeta... pero no podemos usarlo, porque, legítimamente, pertenece a esos organismos unicelulares que viven allí.
- Estás llevando este argumento al absurdo, Scott.
- No, no es así. Sólo te estoy demostrando lo irracional que es el comportamentalizar tu ética, Tom.
No es correcto pescar delfines, porque son seres inteligentes, pero sí lo es el criar pollos, porque tienen un cerebro minúsculo, ¿no? En definitiva, cada distinción es subjetiva, y cada línea que se traza es articifial. ¿Quién sabe qué potencialidad se oculta en un pollo... o incluso en su huevo?
- Justo ése es mi punto de vista, Scott.
- Excepto que te estás olvidando de una cosa, Tom... Todos somos seres vivos, y toda la vida es lucha... sin importar dónde sea que tú u otros queráis trazar la línea, al final, siempre es lo que dijo Darwin: "la supervivencia del más apto".
- Darwin jamás habló de la supervivencia del más apto, Scott. Eso es una simplificación, que se usó para vender su teoría al público. Tú estás hablando de la superioridad de una especie.
- Puedes llamarlo como quieras, Tom. Sigue siendo cierto el que la raza humana debe hacer algo para sobrevivir, y que las especies inferiores no tienen fuerza como para detenernos. Esto no es bueno ni malo, así es como son las cosas. Tienes que dejar de proyectar las motivaciones humanas en otros organismos. Todo es, simplemente, como es... Una mangosta que trata de robar un huevo de cobra no es mala... simplemente está tratando de sobrevivir. Pero la cobra también está tratando de sobrevivir, y si coge a la mangosta en su nido, habrá una pelea. Afortunadamente para la mangosta, ésta tiene reflejos más rápidos y un metabolismo más eficiente. El si esto es "justo" o no, no tiene nada que ver. Simplemente así son las cosas.
- ¿Sí? ¡Pues trata de decírselo a la cobra! Pero, por pura especulación, vamos a dejar a un lado la cuestión de la ética... Lo que tú dices, Scott, es que es correcto el que hagamos lo que nos venga en gana, que explotemos cualquier ecosistema, especie, mientras no nos encontremos con algo lo bastante fuerte como para darnos de hostias.
- Sí lo quieres poner de ese modo, pues sí. Así es como funciona la naturaleza.
- Seguro, eso dicen en el cole... pero no es así en el mundo real. Cada pieza de un ecosistema es interdependiente de las demás. Y es esa interdependencia la que hace tan arriesgado el interferir con los ecosistemas existentes. Incluso los componentes más pequeños son vitalmente importantes. ¿Quién podría haber imaginado que de un puñado de abejas africanas escapadas pudieran nacer millones? ¿O que unas pocas hormigas de fuego brasileñas pudieran hacer que, en sólo setenta años, la parte sureste de los EEUU fuese prácticamente inhabitable? ¿Y qué me dices de las bacterias comedoras de pretóleo que desarrolaron los ingenieros genéticos para limpiar las mareas negras? ¿Te acuerdas que decían que lo tenían todo controlado?
- Vamos, el petróleo se hubiese acabado antes o después, y he oído que los nuevos inhibidores de la reproducción están diezmando a las hormigas de fuego... Seguro, sufrimos fracasos, pero siempre hallaremos modos en que superar a los problemas que nos enfrenta la naturaleza.
- ¿Siempre, Scott? Yo no estoy tan seguro: me parece que la humanidad nunca aprende. Con frecuencia nos dan coscorrones, pero seguimos sin querer enterarnos de qué va la cosa. Cuando más tratamos de controlar la naturaleza, más se nos escapa, por entre las grietas de nuestra tecnología. Y no tenemos ni idea de la clase de problemas en que podemos estar metiéndonos al trastear con algunas de las cosas que estamos encontrando en las colonias.
- Bueno, hasta ahora lo hemos hecho bien. En todos los planetas capaces de albergar vida que hemos encontrado, lo peor que hemos hallado ha sido la "lepra de la sangre" de Epsilón Indo II... y he oído que ya hay una vacuna contra eso.
Si yo fuera tú, pondría mi confianza en la ciencia. Y dejaría de preocuparme por el hombre del saco. Y ándate con cuidado con lo que dices delante del jefazo, Tom... Lo único que a ellos les importa es conservar sus puestos, y los pones nerviosos al hablar de problemas que áun no existen...
- No me importa, es mi último gran viaje. Me voy, ahora que aún estoy a tiempo... Puede que a ti no te importen las burradas que se están haciendo en las colonias, pero a mí sí. Hemos tenido una larga racha de buena suerte... más de la que nos merecemos. Y seguro que ahora viene una cagada de primera; y si no, al tiempo... Y yo no quiero ver cómo se meten enteros en la mierda. Te repito que no deberíamos estar tonteando con la madre naturaleza. Es una mala puta. Debemos aprender a trabajar con la naturaleza. Tanto confiar en la tecnología está siendo demasiado para mí, Scott. Ya no es un medio para lograr un fin... Se está convirtiendo en un fin en sí. Y la ponemos como muro entre nosotros y lo que nos rodea. Entre nosotros y lo que realmente somos. En los últimos tres mil años, hemos recorrido un largo camino, pero no dejo de pensar que hemos perdido tanto como hemos ganado.
- Así pues, ¿cuál es tu solución, Tom? ¿Abandonar los aparatos modernos y volver a los cuchillos de piedra y a acuclillarse en las cavernas?
- De nuevo te vas al otro extremo, Scott, pero... quizá eso sirviera para volver a ponernos en el camino correcto. Y no te estoy hablando de austeridad ni privaciones. Te estoy hablando de dejar a un lado las muletas de nuestra tecnología y volver a confiar en nuestra fuerza y nuestra astucia. En este tiempo estamos tan aislados, que llamamos héroe a cualquiera que se atreve a enfrentarse a un reto. Pero no siempre fue así: los retos a vida o muerte eran algo corriente. Y los hombres de verdad no esperaban a que la aventura fuese a ellos, corrían a su encuentro, no como los generales y jefazos de emrpesas, que mandan a hombrecillos insignificantes a sacarles las castañas del fuego. Antes, la improtancia como líder de un hombre era determinada por su comportamiento ante el peligro.
- Claro, claro, Tom... muy nostálgico, muy "de macho". Pero no es muy práctico hoy en día. ¿Te imaginas a un puñado de ejecutivos celebrando un torneo para ver quién asciende de cargo? ¿O a ti y a mí enfrentándonos con navajas, para ver a quién le dan mejor valoración como piloto?
- No te equivoques: cada cultura observa sus propios rituales para establecer el estatus del individuo. Fíjate en las peleas y los apuñalamientos por la espalda que se dan a todos los niveles de nuestra sociedad. Y seguimos luchando por las mismas cosas: propiedades, poder, derechos territoriales... La única diferencia es que nuestros métodos se han hecho más sutiles, menos directos. El sistema antiguo me parece más honesto.
- Eres un idealista, Tom. ¿Y qué pasa cuando gana el malo?
- Que entonces el matón se convierte en cacique... eso es volver a la manada. En todo sistema hay equilibrios y válvulas de seguridad, Scott.
- Ajá, pero tu método lo deja todo a la inicitiva individual. Y, sin algún tipo de método aceptado de disentimiento uno tendría que ser un auténtico héroe o muy burro para enfrentarse con el jefe.
- ¿Y qué? ¿Es que las cosas son diferentes entre nosotros? Tú siempre me estás diciendo que vaya con cuidado con lo que digo ante los ejecutivos... ¿Dónde está mi método aceptado de disentimiento? Al menos si le parto la cara a un tío, se entera de que no me gusta lo que está haciendo.
- Ya vuelves con tu idealismo. Estás tratando de ponerlo todo muy romántico, como si se tratase de dos tigres que se pelean para establecer quien manda, o quien se queda el mejor terreno de caza. En esa misma situación, los humanos se matarían unos a otros. Ya superamos el instinto de la preservación de la especie, que prevalece en los seres inferiores, pero no hemos ascendido hasta el tipo de moralidad de la que tanto te gusta hablar, Tom.
De acuerdo, la sociedad que hemos creado no es perfecta, pero funciona. Probablemente, más debido a nuestro nivel tecnológico que a pesar del mismo. ¿A cuántos tipos no les gustaría cambiar sus aburridos trabajos por el tuyo, hecho posible por la tecnología? Pero, si quieres volver a la naturaleza, hay modos en que lograrlo. Vete a uno de esos safaris "por la selva" de Alfa C. Creo que los ingenieros de genes han logrado algo que parece un elefante. O, si quieres verdadera aventura, firma por una temporada como ranchero en nuestra siguiente parada: hay aire fresco, trabajo duro, y bien poco más. Quizá ésa sea tu idea del estar bien... aunque no creo que nadie te envidie en ese empleo. Yo ya tengo toda la aventura que necesito en el vídeo; bendita sea la tecnología.
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- Estás muy callado, Tom. ¿Qué pasa, estás enfadado conmigo?
- ¿Eh? O no, Scott, estaba pensando... Mira, sé que tú lo has dicho en plan de broma, pero quizá debería ir a uno de esos safaris... o meterme de ranchero. Quizá resulte que tú tienes razón, y que no me guste. Pero al menos debería probarlo. Puede que lo que necesite sea un cambio de ambiente, volver a la tierra y a los seres vivos. volver a poner algo de aventura e incertidumbre en mi vida. ¿Te he contado que una vez fui de caza...? Tenía un tío que era rico. Me llevó a cazar codornices, cuando cumplí los quince... Dijo que eso me haría un hombre, pero yo sólo veía lo grande que era mi escopeta y lo pequeños que eran los pájaros. Supongo que podía entender el potencial de excitación que tiene la caza, pero, para mí aquello no era emocionante... los pájaros no tenían posibilidad alguna. Me pregunté cómo sería cazar algo, que a su vez pudiera cazarme. El reto, el peligro, hablar de tú a tú con la naturaleza, arriesgarlo todo en base a tu propia habilidad y fuerza....¡eso sí que tiene que ser emocionante!
Quiero decir que... mira cómo nos ganamos nosotros la vida: enchufando el ordenador, apretando unas teclas... Tenemos todo el trabajo hecho. Con un poco de entrenamiento, cualquiera podría hacerlo. Y yo quiero hacer algo que me haga latir el corazón con fuerza. Supongo que es lo que quería decir con mi perorata antitecnológica. No es que la tecnología sea mala en sí misma, pero, de vez en cuando, hemos de dejarla a un lado, y hacer algo que nos recuerde que vivimos, probar que podemos lograr algo, bastándonos sólo por nosotros mismos.
No puedo dejar de pensar que una experiencia así cambiaría a una persona... quizá de un modo que no advertiría más gente, pero sería algo que uno llevaría dentro,por el resto de su vida.
- Sé lo que quieres decir, Tom. Como la primera vez que follas, ¿no? ¿Te he contado alguna vez cómo me pasó a mí? Mira, estaba en una fiesta y...
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¡Hola a todos! Esta fue mi primera entrada del otro blog que dediqué al universo AvP (y más concretamente a su trasfondo y versión de wargame de miniaturas, diseñado por la empresa de miniaturas PRODOS) el cual quise presentar mediante un pequeño relato, extraído totalmente del primer capítulo de una serie de cinco cómics editados por Norma. Me parece que encaja a la perfección con la esencia de estos dos seres del género de terror futurista y de ciencia ficción, y que aporta una interesante reflexión sobre algunos aspectos de la condición humana.
De este universo escribiré principalmente sobre temas de trasfondo de estas criaturas (y de la corporación Weyland-Yutani, casi huelga mencionarla), y sobre el juego ideado por PRODOS (reglas, tácticas, informes de batalla, tanto en su versión de juego de tablero como wargame), aparte de compartir con vosotros mis proyectos de pintado y escenografía, como ya pudisteis ver en otras entradas previas:
Acumulación de cañerías
Depósito de combustible y coberturas Deadzone
Centralita Weyland - Yutani
Guerrero depredador con combi lanza
Pintado peanas sci-fi
Deadzone scenery upgrade pack
Espero que disfrutéis de este nuevo espacio que comparto con vosotros. ¡Un saludo!
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