“Aún no habéis comprendido a qué os enfrentáis. Un
perfecto organismo. Su perfección estructural sólo está igualada por su hostilidad.
Yo admiro su pureza, es un superviviente al que no afecta la conciencia, los
remordimientos ni las fantasías de moralidad... No tenéis ninguna posibilidad,
pero... contáis con mi simpatía”. – Ash, refiriéndose al Alien
El xenomorfo XX121, comúnmente referido como el xenomorfo y
conocido coloquialmente como el Alien, es una especie extraterreste
endoparásita y altamente agresiva. Los xenomorfos son crueles criaturas
depredadoras cuyos propósitos son la propagación de su especie y la destrucción
de cualquier forma de vida que pueda suponer una amenaza para ellos.
Como las avispas o las abejas, los xenomorfos son
eusociales, con una reina fértil que engendra una hueste de castas
subordinadas. Las criaturas son conocidas por su sangre ácida y
su mandíbula faríngea, aunque su ciclo de vida biológico, que
comienza al ser implantado en un huésped viviente justo antes de eclosionar
violentamente a través de su pecho, es en muchos modos su aspecto más destacado.
El diseño original del Alien se debe al artista surrealista
suizo Hans Rudolf Giger, diseño originado en 1976 en una litografía llamada
“Necronom IV” y refinado para la primera película de la serie, “Alien”, en
1979. Evoca deliberadamente muchas imágenes sexuales, ambas masculinas y
femeninas, para ilustrar la imprecisión de la dicotomía sexual humana. El
diseño de la especie y ciclo de vida ha sido extensivamente añadido a través de
cada aparición subsecuente, a medida que se han hecho continuos avances en el
campo de los efectos especiales que han llevado a numerosas variaciones en el
diseño de la criatura.
Un par de ilustraciones del gran maestro H. R. Giger (Necronom IV)
Aparte de sus repetidos conflictos con los humanos, los xenomorfos
han sido notablemente asociados con los Yautja (predators), como bien se puede
observar en toda la franquicia de películas, cómics, novelas y videojuegos de
“Aliens vs Predator”. El xenomorfo también ha sido asociado en múltiples
spin-offs y crossover de otras franquicias bien conocidas (Terminator,
Batman, Juez Dredd…).
Características
Los xenomorfos son ante todo depredadores solitarios que
tienden emboscadas, aunque se conoce que adoptan tácticas de enjambre cuando
actúan en grupos grandes. Aun a pesar de su voraz habilidad para matar, a
menudo buscan mantener a sus víctimas vivas para ser huéspedes de más
xenomorfos; las víctimas son llevadas a la Colmena (o simplemente a una localización
aislada si no existe una colmena), envueltos en un capullo y/o inmovilizados
antes de ser impregnados con un embrión de xenomorfo. De todos modos, cuando su
objetivo se convierte en una amenaza o no sirve para la cosecha, el xenomorfo
no dudará en eliminar rápidamente al huésped.
Apariencia
Externamente, tienen una apariencia de esqueleto biomecánico, cuyos colores generalmente se componen de sombras de negro, azul, gris o bronce apagado. Su altura varía de dos metros a mayor, aunque las formas no adultas son más pequeñas y los especímenes de Alien corredor o acechante son más pequeños; y su peso oscila de unos 100-150 kgs hasta unas cuatro toneladas y media (o incluso más).
Independientemente del organismo huésped, poseen de forma
invariable unos cráneos distintivos de forma alargada y cilíndrica, y no poseen
ningún otro rasgo facial aparte de su boca. La forma del caparazón de su
cabeza es variable, desde lisa y parcialmente translúcida hasta opaca con
diseños arrugados y afilados. Se ha propuesto para explicar este fenómeno el
hecho de que es un proceso de maduración, y que las criaturas más jóvenes (como
los drones o zánganos)
poseen las formas más lisas y redondeadas, mientras que los especímenes de
mayor edad, como los guerreros,
presentan los diseños arrugados de las crestas. Estos diseños son a menudo
visibles dentro del caparazón liso de los drones.
El arma básica de los xenomorfos es su mandíbula faríngea interior, la
cual puede dispararse desde su boca como un pistón con la suficiente fuerza
como para atravesar hueso y metal. De hecho, una táctica comúnmente utilizada
por estas criaturas es eliminar a su presa inmovilizándola con sus manos para
después liquidarla con un golpe preciso de la mandíbula directo a la cabeza,
perforando a través del cráneo y penetrando el cerebro; esta forma de ataque es
coloquialmente llamada como “mordisco en la cabeza”. En muchas ocasiones
se ha visto a los xenomorfos suspendiendo los cadáveres de sus presas desde las
alturas para acto seguido realizar este ataque.
La mandíbula faríngea interior de estos seres
Los xenomorfos tienen colas cuyas puntas acaban en forma de
cuchilla. La afilada punta ha sido vista en formas que varían desde un aguijón
similar al de un escorpión hasta una gran cuchilla plana. A pesar de su delgada
apariencia, la cola de esta criatura es una arma increíblemente potente, lo
suficientemente fuerte como para empalar y levantar con aparente poco esfuerzo
a un Yautja desde el suelo. Las colas son usadas como armas para apuñalar,
cortar y golpear.
En la parte dorsal de su cuerpo los xenomorfos poseen
varios tubos dorsales, típicamente dos pares, uno mayor encima y otro más
pequeño debajo, a menudo acompañados de un quinto y más afilado justo debajo de
la base de su cabeza. El
propósito exacto de estos tubos no está definido.
Como resultado de su “reflejo del ADN” los xenomorfos han
aparecido tanto como organismos bípedos o cuadrúpedos, generalmente en
concordancia con su huésped. Por ejemplo, xenomorfos engendrados de humanos o
Yautja generalmente poseen formas humanoides y andan a dos patas, mientras que
los xenomorfos engendrados de huéspedes cuadrúpedos (referidos como “corredores”
o “acechantes” poseen patas idénticas a los organismos cuadrúpedos y
suelen moverse predominantemente a cuatro patas.
Alien corredor o acechante
Habilidades físicas
Los xenomorfos cuando se yerguen son aparentemente bípedos,
aunque pueden moverse igualmente a cuatro patas (aunque el huésped fuese
bípedo), de hecho es la posición que suelen adoptar cuando corren. Son
totalmente capaces de correr y trepar por superficies verticales como muros y
paredes, incluso por techos, y son unos saltadores excelentes. Poseen una gran
fuerza física, habiéndose conocido que pueden romper conductos de metal y
deformar puertas de metal con poco esfuerzo, incluso derribar puertas
reforzadas y presurizadas con tiempo. Sus largas garras pueden desmembrar a un
humano con gran facilidad, mientras que su mandíbula faríngea es capaz de
producir un mordisco que atraviesa prácticamente cualquier metal no
excesivamente grueso.
Estos seres no desprenden calor y su temperatura se
equipara a la del ambiente en el que se encuentren. Las temperaturas adversas
extremas parecen tener poco, si algún siquiera, efecto en su funcionamiento
fisiológico. De hecho, son unas criaturas increíblemente resistentes, ya que
temperaturas que rápidamente incapacitarían o matarían a un ser humano apenas
tienen efecto en ellas. De hecho se conoce que un alien corredor en Fiorina 161
sobrevivió al ser sumergido en un contenedor repleto de plomo fundido. Incluso
son capaces de sobrevivir en el vacío del espacio, al menos por un período
limitado de tiempo.
Sentidos
Los estudios de la Lasalle Bionational han mostrado que los
xenomorfos poseen diversos sentidos. El primero y principal en ser descubierto
ha sido que poseen diversas estructuras sensoriales a lo largo de la estructura
de su cabeza que les permiten percibir cambios en las vibraciones atmosféricas
del ambiente (sonido). Dada la amplia longitud de sus cabezas, se piensa que es
el principal medio que utilizan para desenvolverse en el medio.
Estas criaturas también son capaces de detectar cambios de
temperatura a través de unos altamente sensibles órganos termorreactivos
localizados detrás de la placa frontal de su cráneo.
Finalmente, poseen unos órganos fotosensitivos vestigiales
situados bilateralmente a la capa frontal; se piensa que estos receptores
visuales ayudan a los xenomorfos a verse entre ellos, ya que no producen calor
corporal. Este remanente de órganos visuales les permitiría la necesaria
percepción del espacio al atacar a una presa.
Sangre y secreciones
La sangre de los xenomorfos es un ácido
molecular extremadamente concentrado y potente que puede corroer prácticamente
cualquier sustancia con alarmante velocidad. Es de color verde amarillento. De
hecho la sangre es una especie de “batería” biológica que provee a la criatura
de energía, y parece ser presurizada dentro del cuerpo de tal forma que cuando
es herido salpica por doquier como una medida defensiva. Esta sangre puede ser
dramáticamente problemática al encontrar xenomorfos en una nave, ya que usando
armas de fuego tradicionales o explosivos para atacar a estas criaturas puede
hacer que su sangre provoque daños muy graves en la nave.
Un ejemplo de lo que unas gotas de su sangre puede provocar.
Se conoce debido a ciertos eventos que los xenomorfos son
conscientes de los efectos de su sangre ácida y que incluso los explotan en su
ventaja – por ejemplo, en la USM Auriga un Alien y otro xenomorfo clon
escaparon de su celda de contención atacando a un tercero, causando que su
sangre derritiera el suelo de la celda, o en otra ocasión provocándose heridas
para liberarse de unas cadenas al derretirlas.
Algunas formas de xenomorfo “escupen” ácido, tanto como
herramienta o como medio de ataque. Por ejemplo los abrazacaras regurgitan una pequeña cantidad de
ácido para derretir obstrucciones entre ellos y un huésped potencial, tales
como una mascarilla o un casco espacial. También los xenomorfos adultos pueden
escupir ácido para cegar e incapacitar a sus víctimas más que para matarlas.
Por su parte, los escupidores
de ácido lanzan chorros de
ácido a una distancia considerable provocando grandes daños.
A pesar de tener imunidad a su propia sangre, los
xenomorfos son vulnerables al ácido fluorhídrico.
Referente a otras secreciones,
los drones o zánganos producen una especie de resina dura y espesa (vomitada
desde sus bocas) que usan para construir sus colmenas y envolver en capullos a
sus víctimas. Esta sustancia tiene el efecto añadido de paralizar a sus
víctimas, facilitando su transporte a la colmena o la implantación de un
embrión.
Inteligencia, comunicación y conducta
Los incidentes de Hadley´s Hope y la USM Auriga mostraron
que esta especie tiene un excelente aprendizaje observacional y de resolución
de problemas. En ambos casos los xenomorfos se las apañaron para aprender a
operar la maquinaria de su ambiente mecanizado a un nivel muy básico. En
Acheron fueron capaces de cortar la fuente de energía de una parte del complejo
para ganar acceso a sus presas humanas, mientras que la Reina aprendió a usar
un elevador simplemente observándolo una vez.
Se ha teorizado que la inteligencia y comportamiento
individual de estos alienígenas puede ser influencia por su huésped. Por
ejemplo, un Predalien visto en BG-386 arrancó el cráneo de un humano como
trofeo, coincidiendo con el comportamiento común de los Yautja.
Los xenomorfos han demostrado poca emotividad, excepto para
su propia preservación e instinto maternal entre la Reina y sus huevos.
Los medios por los cuales los xenomorfos se comunican entre
ellos no están claros, aunque de lo que se puede deducir de su comportamiento
tienen la habilidad para ello. Aunque son capaces de vocalizar una variedad de
siseos y gritos, parece probable que la mayoría de su comunicación se
realice por otras vías, posiblemente mediante la liberación de feromonas,
ultrasonidos o incluso alguna forma de telepatía. Emiten pocas vocalizaciones
más allá de los siseos y gritos de dolor o de ataque, pero de otra forma
permanecen silenciosos, especialmente cuando acechan a una presa.
Estas criaturas poseen una habilidad única para heredar
recuerdos de forma genética, transferidos de una generación a otra. Estos
recuerdos van más allá del mero instinto, y pueden incluir recolecciones de
eventos muy específicos presenciados por generaciones anteriores. De acuerdo al
Dr. Wren de la United Systems
Military, el propósito de esta habilidad de memoria genética es asegurar
que la especie permanezca intacta a pesar de “las diferentes características
que podrían tener que adoptar de sus variados huéspedes”.
Se ha propuesto que la detección de feromonas y el aroma
del miedo de su presa al confrontarlo pueden determinar la conducta y
hostilidad del xenomorfo en sus ataques. Estudios documentados parecen indicar
que el xenomorfo puede realizar muertes brutalmente sanguinolentas cuando
perciben que la víctima está aterrorizada por su presencia (como ejemplo la
muerte de Lambert a bordo de la USCSS Nostromo) mientras que llevan a
cabo muertes más limpias y rápidas cuando su presa no es consciente (o apenas)
de su presencia. También parece que la detección de feromonas puede ayudarles a
localizar a su presa, ya que los organismos sintéticos no poseen dichos agentes
químicos y los xenomorfos suelen ignorarlos tanto como no sean molestados.
Sexo biológico
Es una cuestión altamente debatida. De todos modos, la teoría
predominante es que la especie es hermafrodita, aunque incluso esta definición
sigue siendo especulativa ya que no resulta claro si los individuos poseen
algún carácter sexual en el sentido tradicional. A pesar de esto, las Reinas
son comúnmente referidas como hembras (debido a su rol como ponedoras de huevos
y líderes de las Colmenas, comparable a castas femeninas en el reino de los insectos),
aunque la precisión estricta de esta definición es incierta y a menudo
simplemente una cuestión de convención lingüística.
Se conoce que algunos Yautja se han referido a la especie
de forma colectiva como hembras, pero es posible que simplemente sea otra
convención lingüística o debido a diferencias con el lenguaje y cultura
humanos.
Dieta
Poco se conoce acerca de su dieta. El hecho de que su
sangre produce la energía suficiente para sus cuerpos indica que no requieren
de ningún sustento en la vía tradicional.
Por un lado se sabe que los xenomorfos de Hadley´s Hope en
Acheron no se alimentaron de los humanos capturados, ya que los marines
coloniales que entraron en la Colmena pudieron observar que ninguno de los
cuerpos de los colonos había sido consumido ni siquiera de forma parcial.
Además, los marines de la USS Sephora encontraron evidencias de que incluso
cuerpos que habían sido envueltos hacía 17 semanas no habían sido devorados de
ningún modo tras su muerte. Pero hay evidencia que contradice este punto
anterior. Por ejemplo, el corredor de Fiorina 161 fue visto ingiriendo al menos
alguno de los humanos que mató.
Por lo tanto, es posible que la sangre del xenomorfo le
aporte la suficiente energía para su actividad, pero que la comida ayude a
reponer la energía gastada tras una lucha, persecución o cualquier otra
actividad muy demandante, como una explicación sugerente que reúna ambos
fenómenos observados.
Ciclo vital
El ciclo de vida de un xenomorfo es un proceso complejo que
se distribuye en varias fases características. La criatura comienza su vida
como un ovomorfo o huevo puesto por una Reina, del cual nace una larva
parasitoide conocida como Abrazacaras,
que en cuanto se le presenta la ocasión “impregna” a un huésped viviente con un
embrión llamado Revientapechos (chestburster). Después de
una gestación de varias horas, el revientapechos erupciona violentamente a
través del pecho del huésped (como su propio nombre indica), provocando la
muerte del mismo. El revientapechos madura rápidamente hacia adulto (el proceso
puede llevar sólo unas horas), mudando su piel y sustituyéndola por sustancias
mucho más duras y resistentes. El adulto resultante, conocido como Zángano o Dron, es el ejemplar más común.
En determinadas circunstancias estos zánganos pueden madurar a Guerreros, y sólo los miembros
más longevos (y en caso de un impulso biológico muy fuerte para preservar la
especie) pueden evolucionar a Pretorianos/Guardias
reales, los cuales, en el caso de no haber una Reina, acabarían convirtiéndose
en ésta. Sólo las Reinas más viejas terminan por evolucionar en las rarísimas y prácticamente extintas Matriarcas, Emperatrices o Madres de la Colmena, de las
cuales apenas hay registros.
1- Huevo; 2- Abrazacaras; 3- Super-abrazacaras; 4- Revientapechos; Fases especulativas de desarrollo a), b) y c); 5- Dron; 6 - Guerrero; 7 - revientapechos real; 8 - Pretoriano; 9 - emperatriz
El ciclo de vida del xenomorfo tiene similitudes con
ciertas especies de insectos parasitoides encontradas en la Tierra.
El uso de un huésped viviente como incubadora del siguiente
individuo es sin lugar a dudas el rasgo más conocido de estas criaturas.
Sociedad
Los xenomorfos operan bajo un sistema de castas, en el que
grupos de individuos especializados desarrollan distintas funciones para su
especie. Por ejemplo, los zánganos se encargarían de las tareas de construcción
de la Colmena, atrapar y traer huéspedes a la Colmena, mientras que los
guerreros la defenderían, atacarían los focos de resistencia enemiga más arduos
e incluso desarrollarían tareas de los zánganos si fuese necesario, todo
dependiendo del impulso biológico y del contexto. No queda claro hasta qué grado
estas castas son sujetas a una jerarquía social, aunque ciertos tipos de
xenomorfo, tales como los Pretorianos o Reinas claramente ejercen control y
superioridad sobre las otras variaciones más comunes.
Se conoce que de forma individual operan de forma
independiente, siguiendo su tendencia a reproducirse rápidamente, y en grandes
números son comúnmente encontrados en grupos y a menudo infestando las áreas
alrededor de un núcleo del cual tratan de ampliar su territorio y consumir
todos los posibles organismos huéspedes en dichas áreas.
Como muchos otros organismos eusociales, los xenomorfos,
particularmente en grupos muy grandes, formarán un nido central o Colmena en la
cual residirán bajo la regencia de una Reina ponedora de huevos. Grupos
incursores serán enviados a las áreas limítrofes para buscar y capturar más
huéspedes, los cuales serán llevados a la colmena y usados para crear más
xenomorfos. En las infestaciones más grandes pueden crearse colmenas “satélite”
subordinadas, con unos pocos xenomorfos, permitiendo que las víctimas sean
envueltas en capullos e impregnadas a una gran distancia de la propia Reina.
Orígenes
Aunque el origen exacto de los xenomorfos no se ha podido
determinar, hay varias teorías sobre sus comienzos que han ganado peso:
Una antinatural forma de vida
Quizá la más prominente de estas teorías es que no se trate
de una criatura natural, sino creada artificialmente cuyo fin es el de ser un
arma biológica de guerra por otra raza muy avanzada tecnológicamente. La
evidencia que apoya esta teoría incluye la biología y apariencia biomecánica,
así como la percibida “perfección” de su naturaleza física. Varios autores han
propuesto que los Ingenieros pudieron ser esta raza creadora, dada
su conocida inclinación a crear avanzadas armas biológicas (incluyendo el
compuesto químico A0-3959X.91-15), aunque otros autores (con menor consenso)
han sugerido que los Yautja fueron los responsables, debido a su
larga y muy cercana asociación con estas criaturas. Hasta la fecha no se ha
hallado ninguna prueba sólida que refute cualquiera de las dos opciones, si es
que no hubiera otras plausibles.
Creación natural
Algunas fuentes del gran y extenso universo sugieren que
los xenomorfos son una forma natural de vida como cualquier otra, cuyo
ecosistema resida allá donde dispongan de presas para así perpetuar su especie.
Su duro y grueso caparazón es el resultado de un planeta extremadamente
violento e inclemente, brutalmente práctico. El mundo del xenomorfo, desde el
momento que nace hasta que muere, es violencia y muerte, ya sea infligiéndola o
recibiéndola. De todas formas, fuera de este sistema es cuando estas criaturas
se vuelven verdaderamente peligrosas, al no haber nada que mantenga su
propagación por el sistema a raya, pueden eliminar todas las especies del
planeta, ya que como se indicó previamente, el fin principal de los xenomorfos
es propagar su especie lo más extensa y rápidamente posible, y para ello
necesitan cualquier organismo huésped compatible.
Se considera el sistema Xenomorph Prime como el planeta
origen de esta raza.
Estudio humano
Debido a su configuración biológica única y su excelso
organismo, el xenomorfo ha sido extensamente objetivo de largas e implacables
investigaciones por equipos humanos. Líderes en este campo destacan la Weyland-Yutani Corporation, la Grant Corporation, Lasalle Bionational y la Z.C.T.
Corporation. Los objetivos de estas investigaciones varían desde el simple
conocimiento para el desarrollo de nuevas aleaciones y vacunas hasta la
completa conversión en armas de estas criaturas y/ó su biología. Debido a la
tendencia extremadamente agresiva del xenomorfo, su inteligencia y letalidad, a
menudo los intentos de estudio han resultado en estrepitosos fallos de
contención y graves pérdidas de vidas humanas.
A un nivel más práctico, la potente sangre ácida de las
criaturas hace que las disecciones resulten problemáticas. No obstante los
investigadores de Lasalle han desarrollado métodos seguros para realizar dichos
procedimientos – tras aturdir a las criaturas con ultrasonidos, son suspendidas
en una solución saturada de potentes agentes neutralizadores que contrarrestan
la sangre ácida. Entonces la disección puede realizarse usando un sistema
remoto dotado de brazos cuyas herramientas de corte son unos potentes y muy
precisos láseres.
A pesar de los peligros intrínsecos a estudiar esta
especie, las organizaciones permanecen tenaces en sus intentos de descubrir los
misterios de su compleja biología para luego someterlos a la voluntad e
intereses humanos.
Nombre
Existen otros términos que se han referido al xenomorfo,
tales como organismo, criatura, serpiente o Kainde Amedha (“carne difícil” en lenguaje Yautja), dragón, monstruo, o simplemente cosa. Son a menudo llamados
“bichos” o “xenos” por los marines coloniales. El nombre técnico de la especie
en latín es Internecivus
Raptus, que significa “ladrón asesino”. No fue hasta 2014 que la criatura
recibió la oficial designación como Xenomorfo XX121 por el autor de “Alien: un
reportaje de la Weyland-Yutani”, S.D. Perry.
En alguna ocasión Aliens específicos han recibido un nombre
más individualizado, como el xenomorfo principal de la película Alien vs
Predator, “Grid” (rejilla, red), nombre que recibió tras haber sido herido por
una de las armas de uno de los Predator; o el “espécimen 6” del videojuego
Alien versus Predator.
"Grid" "Espécimen 6"
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Bueno bueno, aquí inauguro una serie de entradas sobre trasfondo de todo el universo AVP, en este caso sobre nuestros queridos (y temidos) Aliens... En otra entrada hablaré de una forma mucho más extendida sobre los diferentes tipos de xenomorfo que se conocen, esta es una entrada general sobre su especie.
Mucha de esta información la recogí de la Xenopedia (junto a otras fuentes y redacción propias), pero en su mayoría de allí. Os recomiendo la página, es bastante completa.
Espero que os guste, hay unas cuantas cosillas que desconocía de estos bichitos y me ha resultado muy interesante escribir esta entrada.
Si os gusta el material de este blog, querría pediros que os suscribáis y recomendéis mi página, por favor. Es algo muy sencillo y no os llevará más de un minuto, en la esquina superior de la versión web tenéis ambas aplicaciones:
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